Delincuentes se roban la tranquilidad ante la mirada indiferente de autoridades policiales

Polo, Barahona. Las pláticas nocturnas acompañadas del agradable clima que jóvenes y ciudadanos acostumbraban en lugares como "el parquesito, la parada, las inmediaciones del club y la esquina de Cocola", quedaron en el pasado en este municipio.

La responsable de acabar con aquellos encuentros en los cuales se debatían temas de deportes, política y anécdotas, es la delincuencia que ha arropado la comunidad desde hace un poco más de un año.

Para personalidades y municipes preocupados por la situación, la complicidad entre delincuentes y quienes deben combatirle facilita los hechos delictivos y los incrementa a un nivel que sisiembra el terror aquí.

"No hay manera de contar con la Policía porque si usted los denuncia antes de llegar a su casa ya saben de la denuncia porque las mismas autoridades que están para resguardarnos se lo dicen", expresa un ciudadano que pidió reserva de su nombre.

Otros manifiestan que hasta la comunidad ha llegado gente con prontuarios delictivos muy elevados, que no tienen que ver con nadie cuando tienen que atracar o robar en alguna propiedad privada.

Más complejo aún es que las personas de conocen con nombres y apellidos a quienes han robado la paz y tranquilidad que caracterizaba este municipio, pero temen enfrentarlos por preservar la seguridad familiar.

"Sino nos empoderamos ahora, y buscamos sacar a esos cinco o seis delincuentes, ocho o nueve mil habitantes tendrán que abandonar el pueblo", decía impotente otra persona preocupada.

Las autoridades municipales y organizaciones le han dado el frente al problema reuniendo en la comunidad a los actores llamados a enfrentar la problemática, pero sus acciones han sido muy blandas, dejando incluso los mismos agentes que no tienen respuesta a la situación.

Pero otros entienden que no todo está perdido, y que de manera urgente se necesita la intervención del municipio con acciones que devuelvan la paz y tranquiidad a la gente de este lugar.